Testimonios de recuperación en Neuróticos Anónimos

 

NA Funcionó donde todo lo demás había fallado.

 *Testimonio real de recuperación en Neuróticos Anónimos. Descubre cómo una persona encontró esperanza, serenidad y libertad de la neurosis a través del programa de recuperación de 12 pasos y el apoyo del grupo.



Gracias, Grover. Me alegra especialmente decir unas pocas palabras esta mañana porque, justamente, en este mes hace un año que comencé a asistir a las reuniones de Neuróticos Anónimos. Puedo decir que este ha sido uno de los años más felices de mi vida. Estoy muy contenta y en paz conmigo misma.

Hace tres años y medio yo era una persona muy enferma, con neurosis, ansiedad y depresión. Busqué ayuda médica, visité doctores y psiquiatras, pero no encontraba alivio. Hasta que conocí el Programa de Neuróticos Anónimos, donde por primera vez escuché que sí había esperanza.

Desde mi primera junta supe que el Programa funcionaba. Empecé a asistir con regularidad a las juntas online del grupo y poco a poco encontré serenidad, comprensión y crecimiento personal. A través de los Doce Pasos, aprendí a vivir un día a la vez y descubrí una forma nueva de relacionarme conmigo y con los demás.

Hoy soy una persona más madura, emocionalmente estable y agradecida. Mi recuperación la debo a Neuróticos Anónimos, a sus reuniones, a su gente y a su mensaje de esperanza.

*Si tú también sufres de neurosis, ansiedad o depresión, visita nuestro directorio de grupos de Neuróticos Anónimos online  para encontrar ayuda. ¡Hay una reunión esperándote!



De Regreso al Trabajo y No Más Tranquilizantes


*Descubre cómo Dixie, de Washington D.C., superó la neurosis y la dependencia a los tranquilizantes gracias al Programa de Neuróticos Anónimos y las juntas de recuperación.

Toda mi vida adulta sufrí lo que ahora llamo “derrotismo”. Sentía que avanzaba un poco y luego volvía atrás. Mi hermana me sugirió buscar ayuda, pero no creía necesitarla. Con el tiempo, mi situación empeoró y tuve que depender de tranquilizantes… hasta que descubrí Neuróticos Anónimos.

Contacté al grupo de Neuróticos Anónimos en Washington D.C., y a través de su literatura y sus juntas comencé a mejorar. Inicié mi propio grupo , y pronto mi vida cambió: encontré empleo, dejé de depender de pastillas y recuperé la alegría de vivir con mi hija.

Hoy vivo el programa un día a la vez. Agradezco profundamente a Neuróticos Anónimos, a su directorio de grupos, y a todas las personas que comparten su experiencia y esperanza en nuestras juntas.

Doy gracias a Dios por esta maravillosa organización y por la oportunidad de servir.

Lyle
San Gabriel Valley, California.

 

*Si tú también sufres de neurosis, ansiedad o depresión, visita nuestro directorio de grupos de Neuróticos Anónimos online  para encontrar ayuda. ¡Hay una reunión esperándote!